Aprender a saborear la vida no siempre es fácil. La mayoría de veces nos limitamos a engullirla sin a penas descubrir lo que ella suscita. O lo que es peor, somos incapaces de probarla. Siempre he pensado que la vida está para ser triturada, desmenuzada, troceada, masticada y degustada al máximo.
Sólo así seremos capaces de conocer su esencia.
- ¿ Y tu, que haces, estudias o trabajas ?
-¿Yo?.. ¡VIVO!.
cuanta razon por Dios,como sera q vivimos tan pendientes,en los demas,en lo q tenemos y lo q nos hace falta,etc.Y realmente no nos damos cuenta q estamos vivos y vivir la vida.:)
ResponderEliminarmuy bonita entrada,un besito linda!:)
Me ha encantado, sobre todo el pequeño diálogo final... ha sido precioso, ya sé a lo que contestar cuando me hagan esa pregunta tan típica. ;)
ResponderEliminarme hago seguidora, por supuesto, sin pensarlo dos veces.
aquí te dejo mi blog para que te pases: www.talqueasi-yeah.blogspot.com